Hoy celebramos el Día Internacional de las Mujeres Rurales. Esta fecha se señaló por primera vez en el calendario el 15 de octubre de 2008 tras establecerse por la Asamblea General de Naciones Unidas en su resolución 62/132, de 18 de diciembre de 2007. En ella se pone en valor la «función y contribución decisivas de la mujer rural, incluida la mujer indígena, en la promoción del desarrollo agrícola y rural, la mejora de la seguridad alimentaria y la erradicación de la pobreza rural».
Con esta resolución se pretende que poco a poco se implementen medidas que puedan mejorar la vida de las mujeres rurales, incluidas las de la comunidades indígenas y aquellas con discapacidad.
Concretamente, en muchos puntos de España las mujeres de entornos rurales se enfrentan a una desigualdad significativa en lo que respecta a la remuneración, a la propiedad, a la capacidad de decisión o al acceso a recursos. Esto ha llevado a que, durante muchos años, las mujeres tomaran la decisión de mudarse a la ciudad para desarrollarse personal y profesionalmente. Por eso, celebrar este día tiene una razón de peso importante.
Más mujeres en los pueblos
No obstante, los últimos datos que del Instituto Nacional de Estadística son esperanzadores. Desde 2018, los pueblos pequeños han ganado en población femenina. Antes de esa fecha se produjo un éxodo masivo de mujeres rurales rozando las 90.000. Desde 2020, por ejemplo, han regresado a sus pueblos de origen o a otras localidades alrededor de 50.000 mujeres.
La mujer en Cazalla de la Sierra
En nuestro pueblo, Cazalla de la Sierra (Sevilla), convivimos con mujeres directivas, con mujeres empresarias, mujeres agricultoras, mujeres ganaderas, mujeres cuidadoras… Mujeres que cada vez tienen más relevancia en el desarrollo económico y social de un pueblo que con los años también ha sufrido una bajada demográfica.
Afortunadamente, percibimos que esos datos del INE que hemos citado también se materializan en nuestro entorno, puesto que cada vez más mujeres jóvenes regresan al pueblo tras acabar sus estudios para emprender un proyecto personal y profesional desde este pequeño rincón de la sierra.
La mujer en CazallaOliva
No queremos acabar este post sin mencionar a una mujer importante para CazallaOliva. Nuestra Secretaria de la Sociedad Cooperativa Andaluza Olivarera La Purísima, María Luisa Romero Gago, es una parte importante de esta cooperativa. Ella es una de esas mujeres que permanece en el pueblo y que construye aquí su presente y su futuro. En palabras de ella: «Vivir en el pueblo para mí es ganar en calidad de vida en todos los sentidos. Creo que nos beneficia tanto a nivel físico como mental. El contacto con la naturaleza y la falta de estrés con la que se vive en un entorno rural beneficia a la salud, por lo que no cambiaría por nada vivir y disfrutar de mi pueblo. Y más ahora que con las comunicaciones que tenemos, si queremos disfrutar de la ciudad podemos hacerlo en una hora».
Nos quedamos con este mensaje de nuestra querida compañera y deseamos que esta tendencia al regreso de las mujeres a los pueblos siga creciendo y vaya acompañada de una mejora en derechos y reconocimientos. ¡Feliz día!